A medida que las ciudades crecen, la movilidad se convierte en una necesidad y un transporte público eficiente es la clave de la prosperidad a largo plazo. En muchos casos, el BRT, un sistema de transporte rápido en autobús, es la solución definitiva. La reducción del tiempo de viaje, la disminución de la congestión, la disminución de los accidentes de tránsito y los efectos socioeconómicos positivos son solo algunos de sus beneficios. El BRT favorece el crecimiento y la calidad de vida de la población.
Cuando se implementa una solución de BRT, las cosas empiezan a suceder al instante. Los pasajeros que eligen el BRT reducen su tiempo de viaje, en algunos casos hasta en un 50 %, y la velocidad media aumenta para todo tipo de tránsito a lo largo del corredor. Esto hace que el BRT sea una opción popular. Por tanto, una parte importante de los viajeros elegirá el BRT en lugar de sus automóviles privados, lo que reduce sustancialmente la congestión vial.
El BRT puede implementarse de muchas maneras. Incluso las aplicaciones más básicas pueden resolver graves problemas de tránsito, mientras que un sistema a gran escala con doble carril puede dar vida a todo un distrito urbano.
Cuando se sacan los automóviles de las calles, una ciudad mejora la calidad del aire, se reduce el ruido y se reduce el número de accidentes. Las emisiones por pasajero descienden hasta un 90 % en comparación con los desplazamientos en automóvil. Los accidentes de tránsito a lo largo del corredor del BRT se reducen sustancialmente. Tras la inauguración de la red TransMilenio en Bogotá (Colombia), en el año 2000, se registró una reducción del 80 %. Así pues, el BRT supone una mejora de la calidad de vida de los habitantes de la ciudad, además de beneficios socioeconómicos inmediatos.
Pero la gran victoria llega a largo plazo. Tras los efectos positivos iniciales, un sistema de BRT sigue facilitando el desarrollo de la ciudad. Con más gente en movimiento, los negocios locales prosperarán y aparecerán nuevas empresas a lo largo del corredor. Esto se traducirá en un aumento del valor de la propiedad, más oportunidades de trabajo y una economía local más fuerte.
Volvo ha estado en el centro del desarrollo del BRT desde el nacimiento de la idea. Por lo tanto, hemos aprendido a satisfacer todas las diferentes demandas, requisitos previos y criterios de las ciudades de todo el mundo. Sabemos que cada ciudad tiene diferentes posibilidades y requiere una solución propia, y sabemos lo que hace que el BRT sea un éxito para la ciudad.
Los autobuses del BRT circulan por sus propios carriles. En casos extremos, incluso carriles dobles, lo que permite que haya líneas exprés en la misma ruta; tener una ruta libre por delante hace que se pueda operar con confiabilidad y puntualidad.
Los autobuses más grandes del BRT de Volvo pueden transportar cerca de 300 pasajeros, comparable a un Boeing 767. Y en las rutas más concurridas, las salidas frecuentes hacen que tener un horario sea obsoleto: siempre hay un autobús en camino.
El prepago es la clave de la eficiencia. Cuando las amplias puertas se abren, los pasajeros salen y suben rápidamente y la parada promedio del autobús dura menos de 15 segundos.
Los sistemas BRT desarrollados utilizan plataformas con la misma altura que el suelo del autobús. El embarque es más rápido para todos y mucho más fácil para las personas mayores y con discapacidades funcionales.
Con un sistema de gestión del tránsito, los pasajeros saben siempre cuándo llegará el autobús. Los pasajeros, los conductores y el control del tránsito comparten la misma información en tiempo real.
La experiencia demuestra que los sistemas BRT son populares. En muchas ciudades se convierten en marcas fuertes, posicionadas por encima de los servicios generales de autobús. La alta tasa de ocupación también da lugar a un buen negocio. El BRT puede ser rentable sin subsidios.
Modelo | Convencional | Articulado | Biarticulado |
Largo | 12 m | Hasta 22 m | 24 a 30 m |
Capacidad | Hasta 100 pasajeros | Hasta 200 pasajeros | Hasta 300 pasajeros |
La gente necesita un transporte accesible y rápido. La rentabilidad de una inversión en BRT supera todas las alternativas comparables.
Volvo es el líder mundial en sistemas BRT de alta eficiencia. Hoy en día se pueden encontrar sistemas BRT de Volvo en 6 continentes, con una amplia gama de autobuses, servicios conectados, formación de conductores, contratos de servicio y asistencia técnica. Cada ciudad requiere una solución propia, a menudo con autobuses fabricados específicamente para la ciudad en cuestión.
El BRT ha demostrado ser una forma muy rentable de proporcionar una amplia capacidad de transporte público. Es a largo plazo cuando más se beneficia de un sistema de BRT. Sin embargo, ya desde el principio el BRT aporta mucho más a su ciudad. El tiempo de construcción es una fracción en comparación con las soluciones ferroviarias. Además, el mantenimiento y el servicio de los vehículos son mucho más asequibles.
Una ciudad puede implementar una movilidad masiva eficiente más rápidamente y a una fracción del costo si elige una solución de BRT. Las cifras están, por supuesto, sujetas a variaciones locales, pero es un hecho que el BRT ofrece mucha más capacidad para una inversión determinada, por ejemplo, 1.000 millones de dólares.
En comparación con el tren ligero y el metro, el BRT es más fácil y rápido de poner en marcha. Y el impacto medioambiental durante la construcción también es diferente.
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